¿Qué entendemos por inteligencia emocional? Según Goleman;
Es un concepto con una significación muy amplia, que incluye la capacidad de motivarse y de seguir adelante a pesar de las frustraciones, de controlar los impulsos y aplazar las gratificaciones, de regular los estados de ánimo, y de evitar que las desgracias nos impidan la posibilidad de pensar, y desarrollar empatía y esperanza. (Gómez-Bruguera, 2003, p. 33).
Consideramos que trabajar las emociones es un aspecto que debería ser muy importante en nuestras escuelas y fundamental en la educación y la formación del alumnado, ya que los niños y niñas a medida que van creciendo y desarrollándose van descubriendo y sintiendo nuevas emociones y experiencias ligadas a estas, incluso en muchos de estos casos no son conscientes de que están sintiendo realmente. Es por ello que las emociones están fuertemente ligadas al bienestar del alumnado y al desarrollo de su autonomía.
Además de todo lo expuesto, y como podemos ver en la cita, es algo básico y necesario para que los niños y niñas sean capaces de pasar por malos momentos y superarlos, proporcionarles una fortaleza emocional que les permita ser personas completas y capaces.
Planteamos para tratar esto trabajar día a día las emociones mediante una serie de actividades diarias, incluso entre los propios compañeros, y el uso de la técnica mindfullness.
La actividad trata de prestar una atención plena, con el cuerpo y la mente relajada, intentado de hacernos
ver cómo nuestro cerebro tiende a distraernos con pensamientos o fantasías. También, ayuda a desarrollar
una calma mental, la cual será más estable cada vez que hagamos la actividad.
Este método ayuda a ver con claridad cuando tu estado de ánimo está empezando a cambiar y se aprende
a desplegar la capacidad para permitir que los estados de ánimo, sensaciones y pensamientos puedan ir y
venir, sin tener que enfrentarse a ellos.
Con esta actividad podemos sentir mayor placer y valorar las cosas buenas que suelen pasar inadvertidas,
como también podemos afrontar con mayor fuerza las dificultades que nos encontramos.
Ensayos clínicos controlados han demostrado que la terapia cognitiva basada en la conciencia plena
puede reducir la probabilidad de recaída en un 40 o 50 por ciento de las personas que han sufrido tres o
más episodios anteriores de depresión.
Estas dinámicas que proponemos y las bases que las sustentan están desarrolladas en el el correspondiente apartado sobre las metodologías.